Prejuicios FALSOS: El PIB es una buena medida del crecimiento económico sostenible

Comprimidos de 3conomía de izquierda

Prejuicios económicos

Existen un conjunto de creencias, repetidas por todas partes, que son aceptadas como ciertas pero que en realidad no superan un análisis detenido.

Son prejuicios que condicionan nuestra manera de pensar y que hemos de desaprender si queremos plantear una política económica de izquierdas.

Prejuicio:

El PIB es una buena medida del crecimiento económico sostenible FALSO!

Resumen:

Los incrementos de PIB miden los incrementos de producción que es una medida de la obesidad de la economía y no de un crecimiento sostenible.

Texto

Uno de los prejuicios más aceptado y que condiciona las decisiones de política económica es el referido al PIB. Por este motivo repito aquí esta entrada que realicé en mi blog http://salutipessetes.blogspot.com.es/2012/10/el-pib-mide-la-obesidad-de-la-economia.html

Con un objetivo pedagógico, parto de la idea de que la economía es un sistema con semejanzas con el cuerpo humano.

Así, mientras que en la economía, el crecimiento se mide mediante el PIB (Producto Interior Bruto), donde se incluye el valor de todo lo producido en un año, para medir el crecimiento del cuerpo humano no se usa únicamente el peso sino que se complementa con la altura.

¿Qué pasaría si, para valorar el crecimiento de una persona, midiésemos solamente su peso? Creo que nadie estaría de acuerdo con un ideal basado en la obesidad porqué todos tenemos claro que, para el desarrollo sano de un cuerpo, se requiere una relación proporcionada entre el peso y la altura.

¿Entonces, por qué en economía se usa como objetivo máximo tan solo una medida de “peso”(PIB), cuando tendríamos que valorar, como en el cuerpo humano, también, su desarrollo ?

En el actual sistema económico, con el objetivo del crecimiento del PIB, se ve positivo cualquier incremento de la actividad económica ni que sea basándose en una burbuja en la construcción, en actividades contaminantes.... a pesar de que pueda contribuir a enfermar la economía.

En cambio, nadie vería positivo cebar a un niño ya que no es saludable y lo único que conseguiríamos sería dañar su salud y malbaratar alimentos.

Son importantes, en el caso de los niños (y también de la economía), las decisiones preventivas para evitar posteriores curas dolorosas de adelgazamiento debidas al sobrepeso insostenible (las crisis en economía).

Parece obvio, pues, que para obtener buenos resultados en economía, igual que en el crecimiento de los niños, no podemos seguir usando el PIB como medida de crecimiento, porqué lo que realmente estamos midiendo es la obesidad de la economía y no su desarrollo equilibrado y sostenible.